Patrick Watson – Wooden Arms. Label: Secret City Records (2009).
Otro viaje que resulta necesario, otro camino que se bifurca en medio de una vegetación variopinta. Al escuchar a este artista canadiense, nos percibimos que todo es más volátil, que nuestras ganas de permanecer resultan inocentes y vagas y que nuestra soledad está llena de fantasía. Wooden Arms es un álbum profundamente melancólico y mágico, suenan campanitas, ruidos, cuerdas, animales y voces del más allá. Escuchando una y otra vez esta composición, hemos creído que la metafísica es una canción de cuna.
El piano y muchos juguetes dispuestos en hilera, la cena está servida, alguien nos dice, abran los oídos por que esta música es medicina misteriosa. Podríamos hablar de virtuosismo (este cuarteto lo demuestra en cada track), pero seríamos poco honestos con la potencia evocadora de este grupo, que ha resultado en los últimos días una especie de banda sonora para acompañar el viaje a Padua. Padua es una región cerca al mar y es encantadora, no es un pueblo como muchos creen. Padua la hemos imaginado en más de una ocasión, quizá nunca la conoceremos y tal vez nunca lo encontremos; quizá, la única percepción que tendremos serán la de unas voces lejanas y de un leve sonido que es generado cuando brindamos por su inexistencia.
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